Ruta en Btt entre Aguilar de Campoo ( Palencia) y Soto ( Cantabria)
Había que buscar una actividad para estos días de fiesta y lo que se me vino a la cabeza fue realizar una travesía en btt, entre estas las poblaciones de Aguilar de Campoo y Soto.Pekis y yo, recorreríamos las villas de esta zona en un recorrido, por el cual , pudiéramos conocer, Ermitas, Iglesias y Santuarios de la zona.
JUEVES SANTO, día 5 de abril:
Recorrido:
Trano I: Aguilar de Campoo → Mataporquera.
Tramo II En tren; Mataporquera → Reinosa.Tramo III: Reinosa → Argüeso → Soto.
Distancia: 40 Km.
Velocidad: 15km/h
Desnivel:
Positivo: 552 m Punto mas alto: 1.060m
Negativo: 538m Punto mas bajo: 845m
Meteorología:
Trenes:
Trayecto: Valladolid→ Aguilar de Campoo.
Precio: 9,60€
Vagón de bicis: El ultimo.
Hospedaje:ALBERGUE EL MONTERO www.alberguemontero.com
Precio: 26€ en M/P
Valoración del Hospedaje:
El Montero, reúne, lo que uno busca. Un magnifico lugar. Bonito en su exterior y en su interior. Siempre atentos, Laly y Carlos, los propietarios del mismo.
Comida, casera, de magnifica elaboración y con cantidades siempre abundantes.
Visita al Pueblo Cantabro: http://pobladocantabrodeargueso.blogspot.com.es/
La crónica :
Sandra había llegado la noche anterior de Barbastro, íbamos a pasar unos días juntos y había que realizar una actividad deportiva, y la elección fue una travesia en Btt., ideada por mi, y con la intención de poder disfrutar de los pueblos, naturaleza y deporte.Miércoles:
Tras la tipica cena precaria, ultimamos el material para la ruta. Colocar el Porta bultos en la bici de Pekis, sujetar la bolsa estanco, etc...Con tantas cosas por hacer, sin querer, nos dieron las 1:30 de la noche.
Jueves:
Ring, Ringgg, -Ya suena el despertador, son las 7:30 de la mañana, cuesta levantarse, tan solo hemos podido descansar 6h, pero a pesar de ello, tenemos ganas de aventurilla. Miramos por la ventana y el día esta gris, ufff..., no pinta bien. Llueve a ratos y en la cabeza nos surgen las dudas de que hacer, pero las ganas de deporte y aventura, tiene mas fuerza. Sabemos que con este tiempo, la ruta tendrá que ser modificada, y acoplarse a las condiciones que la meteorología nos marque.
Desayunazo contundente, las pilas han de estar cargadas a tope, ya que el día será largo y duro. Sandra y Yo, ya estamos listos, para salir hacia la estación de tren. Según coloco el teléfono en una funda estanco, veo un mensaje. Es Javier A., me dice que no puede venir, las taquicardias que ha venido sufriendo, las han vuelto a padecer. Tras ver la noticia, salimos rumbo a la estación y nada mas montar en las bici, comienza a llover. Que mierda,!!! Esta situación es la peor que se puede producir, pero no nos achantamos.Al llegar a la estación, ya encontramos a Miguel A. esperándonos. A el tampoco le acojono el tiempo ¡ que tio mas grande! Sandra y yo, esperamos llegar con esas vitalidad a su edad. En la estación hay movimiento y para nuestra sorpresa hay mucho ciclista. ¡quien nos lo iba a decir!.
El viaje hasta Aguilar nos llevara casi dos horas, así que nos acomodamos bien. En el vagón de cola, donde tienen que ir las bicis y nosotros con ellas, lo tienen ocupado con asientos, así que las 8 bicis que subieron, van de mala manera – Menos mal que es el compartimiento que deben de ocupar- La calefacción también brilla por su ausencia, por lo que no vamos nada cómodos. Según avanzamos hasta Aguilar, la meteorología no mejora manda, incluso empeora. La temperatura ha bajado hasta los 2 grados, pero lo bueno es que no llega a llover.
Al llegar a Aguilar, lo primero que hacemos es tomarnos un café caliente, que realmente es lo que apetece. Allí los lugareños nos dicen que no es un buen día para andar con la bici, que la temperatura es muy fría y el día aun será mas crudo. Les escucho pero no le presto mucha atención, sigo con mi idea, intentarlo, mucha veces he acertado.
Nos ponemos en marcha, da mucha pereza. Pekis, la primera, con dos .......
LA RUTA:
Jueves Santo:
Nuestro primer trayecto va hasta la villa de Quintanilla de las Torres. La lluvia hace acto de presencia, es muy leve, apenas se aprecia. Lo que si notamos es el frío y el viento que nos da de cara. Sopla del norte y corta la cara.
Aquí realizamos una parada para comer un poco y guarecernos del viento.
Retomamos la marcha hacia Canduela, aquí visitamos la Iglesia, unas fotos y a seguir. Próxima parada Menaza, pero aquí ni tan siguiera hacemos el amago de parar, hace mas frió y apetece, dar mas pedales y generar mas calor, para pasar menos frío.
La siguiente villa es Cuena, y en nuestro trayecto por los caminos que atraviesan el páramo, cruzan el camino unos corzos. El agua que caía, da paso a nieve. Esta se hace cada vez mas intensa cuando llegamos a Cuena, por lo que optamos por resguardarnos bajo un pórtico de una casa. Uff, menudo nevadon. Sandra realiza multitud de instantáneas retratando el momento tan bonito, de la soberbia nevada. Pero no nos damos cuenta que es bonito mientras nos encontremos en el pórtico.
Tras comer un poco, decidimos que la ruta no puede seguir. Corregimos el rumbo y nos vamos a Mataporquera a pillar el tren e ir hasta Reinosa, para desde allí, acercarnos a Soto, donde esta nuestro albergue. Pero el trayecto, de 5 Km hasta Matarporquera, es infernal. La fuerte nevada nos la comemos entera. Al ser una nieve muy húmeda, acabamos empapados y con la temperatura que tenemos, 1 º C, las manos se quedan heladas. Así que nada mas llegar a la villa, no metemos en el primer bar que encontramos y del cual no recuerdo el nombre. Sin poder media palabra, Sandra y Yo nos intentamos calentar las manos. La sangre comienza a circular por ella y el dolor en la manos es insoportable, son 5 minutos, de gran dolor, provocando ganas de vomitar. La mujer del bar nos mira sin inmutarse. Es paciente y nos dice que nos demos el tiempo que estimemos. Nos enciende la calefacción para calentarnos y secarnos. Que gente mas agradable!! Por fin pedimos algo, un café talentito, por favor. Con este café y junto a los radiadores, nos quedamos dos horas, hasta la salida del tren que nos llevaría hasta Reinosa.
Al llegar al Reinosa, la lluvia había cesado, era de gran alivio. Ya secos, podíamos acercarnos a Soto sin mojarnos, solo pasando frío. En nuestro camino a Soto al llegar a Paracuelles, a tan solo 2 Km. de Soto, decidimos acercarnos a Argüeso, en donde se encuentra un Castilla y el poblado Cantabro. A 10 minutos andando de la villa, se encouentra el poblado Cantabro, al cual pudimos ver, sus instalaciones pero sin entrar, ya que no teníamos tiempo suficiente para realizar la visita guiada, que dan las personas que se encargan de su gestion . El precio de la visita, es de 4€ y su duración es de 50 minutos. En ella te explican todo, sobre el significado y por que.
VIERNES SANTO, día 6 de abril:
Recorrido:
Soto →Fontibre →Villacantid→ Suano → Poblado de Suso → Barrio→ Espinilla→ Reinosa.
Distancia: 40Km.
Velocidad:
Tiempo: 3h 36m
Desnivel:
Positivo: 327m Punto mas alto: 1098m
Negativo:462m. Punto mas bajo: 835m.
Meteorología:
Trenes:
Trayecto: Reinosa → Valladolid.
Precio: 11, 50 €
Vagón de bicis: Primero.
La crónica :
Viernes Santo:
8:00h, es momento de levantarse. En el albergue, el desayuno lo dan a partir de las 8:30h. Carlos nos lo sirve en el bar-salón, a diferencia del resto de los inquilinos, que lo toman en el comedor. El menú es contundente y variado. Tosta de Pan y algo de bollería industrial. Para Pekis, se limita al café, aunque viendo que la mantequilla y la mermelada es apta para celiacos, aprovecha un chusco de pan que tiene, y se hace unas tostas, al igual que nosotros.
El día esta muy asqueroso, o muy divertido, según se vea. Llueve y no apetece mojarse. Pekis, pregunta a que hora sale el primer tren a Valladolid desde Reinosa, le digo que en 15 minutos, así que no da tiempo. Nos preguntamos por que no hemos madrugado mas y así podríamos a ver vuelto ya. No hay respuesta. Mientras, ultimamos todo, el día comienza a mejorar, se empiezan a ver los primeros rayos de sol. Nos animamos y decidimos trazar una ruta en bici, modificándola, según evolucionara el tiempo.
Nos vamos a Fontibre por el carril bici, allí preguntamos a un lugareño, por la senda que nos lleva hasta Villacantid, nos indica el caminos, tras una extensa explicación. El paisaje es muy bonito, entre árboles y praderas verdes. Por el camino nos cruzamos con un triatleta de Reinosa, que nos identifica en seguida, al ir Miguel Ángel y yo, de rosa.
En la esta villa, aprovechamos para echar agua a los botes y comer algún fruto seco. El día es espléndido y los nubarrones que viene, ni les prestamos atención. Posiblemente estemos moneando mucho, pero no nos damos cuenta.
Decidimos ir en dirección a Suano, en vista de los consejos del colega con el que nos cruzamos. Esta zona, era mas bonita, ya que se encontraba mas próxima a la sierra de Cebolleda.
Tras pasar Suano y al llegar a la punto denominado Paralrio, decidimos varia, nuevamente el recorrido y acercarnos a Población de Suso, para remontar todo el puerto, por carretera. Y fue entonces cuando hizo acto de presencia, primero el granizo y luego la lluvia. Resguardados bajo una mini techumbre y con el muro, quitándonos el viento, aguantamos un rato. En vista que la lluvia no cesaría, inconscientes de nosotros, reiniciamos la marcha, bajando el puente con una fuerte tromba de agua, que nos empapo, en pocos minutos. Decidimos no parar, en el trayecto que nos quedaba para llegar a Reinosa. Queríamos que el cuerpo generase calor para no quedarnos fríos, pero eso iba bien para el cuerpo y no tanto para las manos.
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